Luis Rosales Ortiz

Luis Rosales Ortiz nació un Sábado 11 de Septiembre de 1965 de madre Guadalupe Ortiz y padre Luis Rosales. En un Lunes 26 de Agosto de 1985 se casó con Leticia Chávez Rodríguez. Juntos iniciaron una familia de 5 hijos: Alma Gabriela, Brenda Liliana, Silvia, José Luis y Noé. En vida y presentes solamente queda 4: Alma Gabriela, Silvia, José Luis y Noé. Brenda se fue con nuestro señor cuando tenía 13 años de edad.

Con los años la familia extendió y tuvo la bendición de tener 7 nietos los cuales fueron la luz de su vida. En 2005 Alma Gabriela le dio la primera nieta Jasmine Liliana. En el 2008 llegó el primero nieto barón Aiden Alejandro. En el 2011 Silvia le dio la bendición con Karen Jalile la cual tuvo la dicho de compartir el mismo cumpleaños. En 2014 Silvia le dio vida a Jaime Héctor, en 2015 Alma Gabriela le dio vida a Melani Sofía, en 2018 Silvia le dio vida a Jovan, en 2018 José Luis fue padre por primera vez a Brenda Annaly.

Luis vivió parte de su vida en Chalchihuitez Zacatecas. Luego mudó a California en donde fue que Brenda Liliana descansa eternamente en la ciudad de Modesto California. Luego se vinieron a vivir al estado de Colorado.

En Octubre de 2019 Luis fue informado por primera vez que tenía Cancer. Esta enfermedad se convirtió en una batalla en la cual el nunca perdió la esperanza. El Viernes 10 de Octubre de 2025 nuestro señor eligió recogerlo para su eterno descanso. Ese día estuvo en acompañado de sus sus ceres queridos su esposa, sus hijos, nietos, hermana, sobrinos, y familia inmediata.

Para todos los que estuvieron con Luis durante esos días se les agradece de todo corazón y esperamos que los sigan recordando como el era: bromista, bailador, trabajador pero más que nada un hombre dedicado a su familia.

Una Oración De Despedida: Gracias Dios mío por ver mi cansancio, y dejarme descansar. El dolor se a ido; La Paz es hermosa. Tu amor me rodea. Pelie una buena pelea y de alguna manera en este momento, no importa cuál sea el porvenir, yo siento que eh ganado. Mis deseos: para todo hay una temporada. Yo quiero que mi familia siga adelante con sus vidas, y que sepas que todo pasa por la voluntad de Dios.

Este no es un hasta luego sino hasta la próxima.